La ermita de San Bernabé en Ojo Guareña
Una ermita rupestre en una de las galerías kársticas más grandes de España.
Situada en el municipio burgalés de Cueva de Sotoscueva se encuentra la Ermita de San Bernabé y San Tirso, conectada al complejo kárstico Ojo Guareña.
Ojo Guareña está formado por una red de galerías y cuevas formadas por la acción de los ríos Guareña y Trema y el arroyo de Villamartín. Más de 100 km bajo tierra y 400 cavidades.
Estas cuevas fueron habitadas en el paleolítico ya que en su interior se han encontrado restos de esta etapa como huellas, herramientas y pinturas. Las cuevas que albergan estas pinturas, no son visitables.
De todo el complejo, solo hay dos zonas accesibles al público, la Cueva Palomera y la cueva ermita.
La Ermita de San Bernabé y San Tirso está situada en la entrada principal y es la imagen más característica del lugar. Ojo Guareña pasó de centro rupestre a basílica paleocristiana.
Inicialmente estuvo dedicada a San Tirso, soldado romano que fue martirizado y posteriormente, a San Bernabé. La ermita presenta una bóveda natural de piedra llena de pinturas anónimas que datan del s. XVIII y XIX. Relatan los martirios de San Tirso y los milagros de San Bernabé.
Desde siempre ha sido un lugar importante para los habitantes de la zona, y así queda reflejado en la Sala del Ayuntamiento. Situada al lado de la entrada principal, es el lugar donde desde 1885 hasta 1924 los encargados de la administración de la Merindad se reunían.
En 1970 el complejo fue declarado Bien de Interés Cultural logrando así una mayor protección ya que anteriormente era un lugar natural de libre acceso. Lo que sí que no ha cambiado es su popular romería que se celebra cada 11 de Junio en honor a San Bernabé.