Alella, la población más vinícola del Maresme tiene una de las fincas más impresionantes y a la vez más desconocidos de la comarca aunque haya sido escenarios de películas y videoclips.

La historia de esta finca se remonta al siglo XIV, siendo de uso agrícola y conocida como Mas Torrella, pero su nombre viene a que siglos después fue habitada por diferentes Gobernadores de Cataluña como Pere de Cardona en 1565, Manuel de Llupià en 1963 o Joan Baptista Queralt i Salvà en 1763.

En 1890 la finca pasó a manos de Antoni Borrell i Folch, un importante financiero y político. Al morir éste sin descendencia, deja en testamento sus bienes a la institución religiosa de los Escolapios para que todo niño sin recursos pudiera tener acceso a la educación. En 1916 se crea la Institución Borrell de la Escuela Pia de Alella pasando a ser un centro educativo gestionado por la institución.

Las diferentes etapas arquitectónicas vividas por la finca, más intervención del arquitecto General Guitart i Lostaló junto con el hermano de Antoni, el arquitecto Marià Borrell, crean un conjunto caracterizado por su eclecticismo; fachadas neogóticas, elementos neoarabes, columnas clásicas, detalles modernistas, jardines románticos, esculturas clásicas…

Posteriormente al instalarse el centro educativo y religioso allí, tuvieron que adaptarse algunos de los espacios a su nuevo uso, desapareciendo así algunos elementos originales y transformando espacios.

En 1978 se realiza el último curso como centro escolar pasando a ser en los posteriores años un centro de colonias, convivencias y otros usos de la comunidad hasta que en el año 2000 se cierra definitivamente y se vende a la inmobiliaria Landscape, filial de Banc Sabadell.

La idea de Landscape era convertir la finca en un hotel y apartamentos de lujo pero la explosión de la crisis inmobiliaria y la venta de la inmobiliaria de Banc Sabadell hizo que la finca cayera en el olvido y abandono, convirtiéndose en el paraíso de exploradores de abandonos, vándalos y saqueos.

Es en 2015 cuando lo compra su actual propietario, un millonario ruso afincado en Alella que se enamora del lugar y desde entonces sueña con poder abrir un día un hotel de lujo. Desde entonces va haciendo pequeñas intervenciones, se puede contratar para sesiones fotográficas y ocasionalmente abren sus puertas al público para visitas guiadas.

Pedro Almodóvar  rodó aquí algunas de las escenas de la película La Mala educación (2004) y aquí también el cantante Rafael grabó el videoclip de la versión Maldito Duende (2001) de Heroes del Silencio.

Aún la belleza y majestuosidad del lugar en la actualidad, nada comparable a lo que podemos ver en antiguas fotografías.