La familia Bardou y sus castillos de papel de fumar

La familia Bardou y sus castillos de papel de fumar

Jean Bardou (1799-1852) era natural de Ille-sur Tèt, donde de muy joven ya ejercía el oficio de panadero. Casándose muy joven, se mudó a la ciudad de Perpignan.

Jean era aficionado al dibujo, cosa que le permitió entrar en el mundo del papel. Conoció la existencia de unos libritos de papel de fumar que se elaboraban en España cuando en Francia tenían que comprar a hojas y cortarlas a trocitos.

En 1938 Jean presentó el primer cuadernillo de papel de fumar. El nombre de la marca eran sus iniciales, JB con un diamante en medio. La gente comenzó a confundir el diamante con una O y así en 1849 registraron la marca de papel de fumar JOB.

En 1852 muere Jean Bardou haciéndose cargo de la empresa su hijo pequeño Pierre Bardou.

Su hijo mayor, Joseph Bardou ya se había montado por su parte también su propio negocio de elaboración de papel de fumar en 1849 “Papeteries Jh Bardou”. Una de sus marcas, “Le Nil” fue publicitada de la mano del cartelista, publicista e ilustrador italiano Leonetto Caiello cuyo trabajo se popularizó en Francia.

 

El interés de Pierre por el arte era notable y fue un gran coleccionista. En su casa de Perpignan había colecciones de pintura, escultura, armas…
JOB a finales de siglo comenzó a encargar a los artistas más famosos de la época los carteles que publicitaban su marca. Alphonse Mucha, Ramón Casas, Leonetto Cappiello, Jane Atché…

Entre 1872 y 1875 Pierre compró varias casas en la rue Emile Zola de Perpignan. Allí instaló una fábrica y varias viviendas. Pierre se casó con Léonie Amiel, hija de un pastelero y tuvieron tres hijos, Camille, Justin y Jeanne.

 

Viggo Dorph-Petersen

Viggo Dorph-Petersen (1851-1937) fue un arquitecto danés que estableció contacto con la floreciente burguesía de la comarca de RossellóNacido en la periferia de Copenhague, estudió arquitectura allí y perfeccionó sus estudios en la Escuela de Bellas Artes de París.

En 1880 fue con su esposa a Vernet-les-Bains a dirigir la construcción del Grand Hotel du Portugal. A partir de ese momento se instala en Perpignan donde comienza a recibir encargos. Su estilo, clásico pero con toques modernistas muy de moda en la época comenzó a encajar con la modernización que estaba instalándose en Perpignan tras el derribo de las antiguas murallas.

Pierre Bardou encargó a Viggo tres castillos para cada uno de sus hijos. Para Camille el Château du Parc Ducup, para Justin el Château d’Aubiry  y para Jeanne el Château de Valmy.

Por su parte Eugène Bardou, hijo de Joseph Bardou el creador de la otra marca de papeles, también encargó a Viggo otra construcción, el Château Bardou.

Château Ducup

Este castillo se encuentra a las afueras de Perpignan, dentro de la propiedad de la familia Ducup. Fue en 1746 que Pierre François Ducup se casa con Marguerite de Maris, heredera del terreno. Era una zona agrícola formada por olivos, viñedos, campos de trigo…

A finales del siglo XIX, el militar Charles Ducup, heredero entonces de la propiedad se casa con Camille Bardou. En 1890 comienza la construcción del castillo en la finca. El padre de Camille encarga la obra a Viggo Dorph-Petersen. Constaba de una gran bodega, vivienda principal, edificios para el personal, garaje, taller, establo…La finca también contaba con un jardín estilo inglés, bosque, huerta y lugar para los animales.

Cuando murió su marido, Camille puso el castillo a disposición de los soldados convalecientes que salían del hospital de Perpignan tras la Primera Guerra Mundial. Camille murió en 1934 quedando la finca a repartir entre siete herederos que decidieron vender la finca por parcelas.

Actualmente el castillo es una casa diocesana con oficinas del obispado, la Capilla de Juan Pablo II e instalaciones para retiros espirituales y convivencias.

 

Château Valmy

Situado a las afueras de Argelès-sur-Mer, encargo de Pierre Bardou a Viggo para su hija Jeanne.

Jeanne se casó con Jules Pams que venía de una familia bienestante de comerciantes marítimos de Port-Vendres. Se convirtió en un importante abogado y político que ocupó importantes cargos en el gobierno francés.

Valmy se encontraba en una gran finca vinícola y el matrimonio Pams Bardou continuo con el cultivo de las viñas.

Jules Pams durante su cargo como Ministro de Agricultura impulsó la ley de los vinos dulces naturales y de las denominaciones de origen. Fue un gran embajador de su propio vino  y en su castillo acogía a grandes personalidades y políticos donde degustaban su propio vino dulce.

Tras la muerte de Pams en 1930, Victor Peix compra la finca. Construye nuevas bodegas debajo del castillo e impulsa la marca Valmya comercializando sus vinos dulces naturales. Tras la muerte de Victor Peix en 1952, su viuda Jeanne toma el mando de la bodega que continuará hasta 1980.

En 1997, tras años de abandono y decadencia, Bernard Martorell, nieto de Victor, tras haber cosechado el éxito en el mercado inmobiliario decide retomar el proyecto de su abuelo y decide restaurar el antiguo castillo y volver a comercializar su vino.

El castillo se convierte en la nueva residencia de Bernard y su familia y otra parte del castillo dedicada a alojamiento turístico. Los nuevos vinos se comercializan bajo la marca Chateau Valmy.

 

Château d’Aubiry

Este castillo se encuentra a las afueras de Céret. Nuevamente Pierre Bardou encarga a Viggo la construcción de este imponente castillo para su hijo Justin Bardou. Pierre, no llegó a verlo, murió antes de que empezaran las obras.

La construcción comenzó entre 1893 y 1904, pero la decoración no terminó hasta 1910. Cuenta con un parque de cuatro hectáreas, cien hectáreas para el cultivo de la vid, capilla e invernadero. Las fachadas están ricamente decoradas con elementos esculpidos y trabajos de forja. En su interior pinturas murales de Paul Gervais y Henry Perrault así como tapicerías, mármoles, cerámicas… y otros elementos decorativos que realzan la majestuosidad del castillo.  El invernadero con sus tres cúpulas acristaladas conectadas por galerías fue construido por Guillot Pelletier y Jouffroy de Orleans.

El castillo perteneció a la familia Bardou hasta 1973 cuando lo compró un industrial del este de Francia a quien hoy en día pertenece, la familia De Pra. El castillo ha estado numerosas veces en venta,  podéis ver fotos de interior aquí.

El castillo y sus viñedos tienen unas dependencias pertenecientes a las antiguas bodegas. La bodega Chateau d’Aubiry se creó en 1939 y se puede ver el sello JOB por todas partes. Hoy en día están en desuso aunque las casas de la colonia están habitadas.

Se dice que el castillo custodió obras de arte españolas escondidas para que no fueran destruidas durante la Guerra Civil.

El castillo sirvió de escenario para dos películas “L’Eau à la bouche” dirigida por  Jacques Doniol-Valcroze en 1959  y “L’Ingénu” dirigida por Norbert Carbonnaux en 1971.

En 2006 fue declarado Monumento Histórico.

Château Bardou

En 1900 Eugène Bardou, (hijo de Joseph Bardou el que había montado otra empresa de papel de fumar) compró un terreno en la localidad de Elne para lo que sería su casa de campo. Encargó el proyecto a Viggo y la gente empezó a llamarlo “el castillo Bardou”.

En 1927 murió Eugène y sus herederos pusieron la propiedad en venta. Dos campesinos, los hermanos Mirous la compraron atraídos más por sus tierras y su fertilidad que por el castillo en sí que no llegaron ni a ocuparlo.

 

Llegan los años de la Guerra Civil Española. Elizabeth Eidenbenz fue una maestra suiza que llegó como voluntaria a Madrid en 1937 con la Asociación de Ayuda a los Niños de la Guerra. Después se trasladó a Francia a donde huían muchos españoles a campos de refugiados como los de Argelès-sur-Mer, Saint-Cyprien y Rivesaltes. Elizabeth solía pasar por un lugar semi-abandonado que le llamaba la atención, era el Castillo Bardou. Así empieza la historia de la Maternidad de Elne, un centro que ayudaba a mejorar las condiciones de vida de mujeres embarazadas, madres y niños que huían de la guerra. El 7 de Diciembre de 1939 nació el primer niño allí. Con la Segunda Guerra Mundial, la maternidad también empezó a acoger a madres judías que huían de los nazis. Más de 500 niños nacieron allí.

En 1944 cerró la maternidad y el edificio y su historia cayeron en el olvido.

En 1997 François Charpentier, un artesano vidriero se enamoró del lugar a pesar de su estado ruinoso, lo compró y lo restauró. El viejo castillo volvía a relucir como en sus inicios de la Belle Epoque.

Guy Eckstein llamó a la puerta de la casa de los Charpentier un día de 2001. Se presentó diciendo que había nacido en esa casa. Era uno de los niños judíos nacidos allí. Guy sacó del olvido la interesante historia que había vivido esa casa. El señor Charpentier, conmovido ayudó a Guy a buscar a Elizabeth Eidenbenz. La encontraron en una residencia de ancianos de Austria. En 2002 la llevaron de nuevo a la maternidad y empezaron los reconocimientos por su labor; Medalla de los Justos entre las Naciones otorgada por el Estado de Israel, Cruz de Oro de la orden Civil de la Solidaridad Social del Gobierno de España, Premio Creu de Sant Jordi de la Generalitat de Catalunya y Legión de Honor del Gobierno Francés. Elizabeth murió el 23 de Mayo de 2011 en Zurich a los 97 años.

Nicolás García, alcalde de Elne y nieto de refugiados españoles compra el 14 de Julio de 2004 el Castillo Bardou para convertirlo en lo que hoy se conoce como Maternidad de Elne o Maternidad Suiza, un espacio para la historia y la memoria.

La historia ha sido recogida en libros como el que escribió Assumpta Montellà i Carlos “La Maternidad de Elna” o la película de 2016  “La luz de Elna” dirigida por Silvia Quer (aunque la película no se ha grabado en el lugar original de los hechos).

Hôtel Pams

Como ya he mencionado anteriormente, Pierre Bardou compró varias casas en la rue Emile Zola de Perpignan y se instaló en una de ellas, ahora conocido como Hôtel Pams.

No es que sea un hotel, sino que en Francia y Belgica se le llama así a un tipo de residencia señorial, palacete o mansión urbana.

Cuando Pierre murió, su hija Jeanne y Jules Pams, el matrimonio para los que construyó el Chateau Valmy,  se instalaron allí y Jules trasformó la casa a su gusto  y encargó la reforma al arquitecto Léopold Carlier.

Una parte de la casa se utilizaba como vivienda y la otra como despacho, lugar de reuniones y recepciones  institucionales.

Jules al igual que su suegro también era un gran aficionado al arte. Su casa llegó a rivalizar con el museo de la ciudad en cuanto número de obras de arte. Las pinturas murales que llenan la casa fueron realizadas por Paul Gervais.

Jeanne Bardou murió en 1916 y en 1918 Jules se volvió a casar con Marguerite Holtzer. En 1930 murió Pams con 77 años y en 1946 Margarite vendió el edificio a la ciudad de Perpignan que lo reconoció como Edificio Histórico.

 

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