Puede que por fuera parezca un simple Zara más, pero al atravesar su puerta entrarás en una de las tiendas más sorprendentes del imperio Inditex en España.

Uno de los monumentos más escondidos de Salamanca son los restos del antiguo Convento San Antonio el Real. Construido en el siglo XVII inicialmente como hospital derivando en convento, nunca llegó a terminarse. Un siglo después, con la Desamortización de Mendizábal, el terreno se subastó y se construyeron sobre los terrenos que ocupaba el Teatro Liceo (situado al lado) y un edificio de viviendas en cuyos bajos estaba la oficina del Banco Central.

Para el nuevo edificio de viviendas se utilizaron los anchos muros de la nave central del convento como soporte para los forjados y añadió la fachada actual. El ábside fue destruido  pero gracias al alto coste que suponía, se mantuvo la cúpula y los brazos del crucero.

En 1987 los restos fueron declarados Bien de Interés Cultural por la Junta de Castilla y León y a finales de los 90 Inditex llegó a un acuerdo con los propietarios del convento para su alquiler. Tras 8 años de obras y un gran trabajo bajo la dirección de la arquitecta Sonia Vázquez-Díaz, en 2005 Zara abrió sus puertas.

El convento se restauró en todo lo que se pudo y quedaba. La nave central de la iglesia es ocupada por un volumen exento de acero y vidrio con cuatro pisos.